martes, 29 de junio de 2010

Tiempos de revancha


A falta de jugarse dos partidos para cerrar los octavos de final (Paraguay – Japón y España – Portugal) lo que se ha visto hasta ahora en la fase de los mejores 16 de la copa fue el peso de la historia.
Ayer Brasil aplastaba a un gran equipo como ha sido Chile, el conjunto trasandino hizo una gran copa con un plantel modesto, sumó 6 puntos en su grupo (puntaje el cual en grupos como el de Italia, Alemania o Inglaterra le hubiera asegurado el primer puesto) le tocó una España herida en el tercer partido y tras excelentes 25 minutos, un clamoroso error del arquero Bravo hizo que el conjunto ibérico, primer candidato al titulo (¿Cómo va a ser España para no ganar esta copa del mundo?), se ponga en ventaja y destrabe un partido que se le estaba haciendo complicado, 7 minutos mas tarde, doble error, y segundo de los europeos con la yapa de la expulsión para un jugador chileno, difícil panorama que no paso a mayores, clasificaron los dos, España primera y Chile segundo, el cruce, como dijimos, el mas difícil: Brasil en octavos, poco que hacer. Los chilenos nunca se encontraron cómodos en el campo, y nuevamente, en tan sólo 7 minutos, Brasil sacaba una ventaja de dos goles. El equipo de Dunga frustra a los rivales: no brilla, no tiene cucos, pero tampoco le generan situaciones de gol, Chile, equipo ultraofensivo recién en los últimos 20 minutos del partido logró exigir a Julio Cesar, la cosa ya estaba 3 a 0, la superioridad individual llevada al juego colectivo marcó la diferencia en el partido de ayer. A Brasil le llega Holanda, y en el juego de las similitudes, si algo se parecen estas dos selecciones es su momento de utilizar estilos que le dan la espalda a su historia, un juego contracultural: Holanda ataca de a ratos, con gente rápida y presión por zonas, Brasil se preocupa mas por defender, haciendo de su fondo una fortaleza que comienza en el mediocampo, y arriba suelta a los leones. Un gran duelo en cuartos.

Alemania arrolló a Inglaterra, el gol no dado a los ingleses (que le hubiera dado aire en un partido donde perdían en todos los sectores del campo) dejo en evidencia los malos arbitrajes de la copa (casi tan malos como algunos equipos que no merecían estar en Sudáfrica), Alemania no necesitaba de ayudas, con un juego dinámico, suelto y convencido aplasto a Inglaterra. Cuando debió llevar las riendas del partido lo hizo, centrando su juego en Müller y Özil como dueños de la batuta y destrozando a los ingleses con toques por dentro y por fuera, cuando el partido demandaba un juego de contra también interpretó ese requerimiento a la perfección y liquido al equipo ingles a base de velocidad y gente que realizaba la transición defensa – ataque en apenas segundos, un equipazo que se las verá con Argentina, si, en cuartos, 4 años después.

El destino de la selección Argentina esta marcado por repetir algunos rivales que cruzó en Alemania 2006, México en octavos fue uno de ellos. Desde el vamos, el partido se presentaba como una diferencia muy marcada en las fortalezas de uno y otro equipo, similar a lo de Brasil con Chile, México no era el mismo equipo de hace 4 años, clasificó a la segunda fase gracias a ganar un partido fundamental contra la peor Francia de los últimos 30 años, no venía con las ideas muy claras, su mayor déficit: la falta de gol. En la selección Argentina ocurre lo contrario, partido que pasa, partido que la convierte en una bestia salvaje capaz de todo, cada vez mas hambrienta, sus desajustes en el mediocampo o en la defensa, no son proporcionales al nivel ofensivo de sus delanteros, capaz, los mejores del mundial. Messi desarticula, Tevez agota, Higuaín liquida. México presentó un planteo serio, conservador (lógico, conociendo la virtud del rival y sus limitaciones), complicó a la selección en los primeros 20 minutos con tiros de media distancia pero fundamentalmente robando la pelota en el sector creativo y trabando el juego de la argentina. Cuando la selección combinó juego y velocidad, a México se le hacia difícil mantener el ritmo, hasta que, como en Alemania – Inglaterra, un falló garrafal de la terna arbitral destraba a la selección y hace que el gol de Tevez, claramente en fuera de juego, abra el marcador y el conjunto Azteca se ofusque. No necesitaba la selección esta ayuda, tampoco la pidió, hoy te dan mañana te quitan y al seleccionado argentino, en general, nunca le regalan nada, la contundencia de los de arriba hizo que el partido se ponga 3 a 0, pero no hubo juego colectivo, Di María y Maxi Rodríguez estuvieron muy erráticos, sobre todo el primero, no ofreció juego asociado, ni creativo, además fue el mas impreciso del seleccionado. Maxi dio su habitual despliegue pero también careció de precisión para llevarlo a cabo, trasladaban demasiado el balón, perdían sorpresa y nadie armaba juego. La imagen es clara: cuando Messi necesita bajar al centro del campo a buscar la pelota es porque no le llega, y si no le llega es porque el equipo esta trabado en algún sector, ese sector, en el 90 % de las veces es el mediocampo, nadie ofrece desmarques y juego asociado, por eso un jugador como Verón o Pastore es fundamental en este equipo, alguien que marque los tiempos y centralice los hilos del juego colectivo, que pueda asociarse tanto con Di María, como con Messi o Tevez, esa pieza es fundamental, sino el equipo se vuelve lento, poco armonioso e individual. Será lo más necesario para mejorar a Alemania, una maquinita. De conseguirlo, seguramente el no tan buen nivel de Demichelis no quede tan expuesto, y esta seguridad en el mediocampo, hará que los defensores puedan posicionarse 20 metros mas delante de lo que lo vienen haciendo, veremos. Por lo pronto, las garantías de la selección siguen pasando por el mismo lugar: la brutalidad voraz con la que juegan sus tres delanteros, capaz que ganar partidos que pueden estar perdidos. Argentina – Alemania, se presenta, posiblemente, como el mejor partido de lo que va de mundial, veremos.
Uruguay superó a Corea con un Luis Suarez en llamas y le ganó a sus últimos 40 años de historia, si el juramento persiste sobre los sueños que ofrecen de todo menos ganas de despertar, el equipo Charrúa puede estar ante una posibilidad única de alcanzar las semifinales, en frente, Ghana, el último sobreviviente africano, que superó a Estados Unidos, en los que fue y es (junto con Uruguay – Corea del sur) el cuadro mas accesible de la copa.

Dentro de media hora arranca Paraguay – Japón, y a la tarde el partidazo de la jornada, España – Portugal, sus futuros ganadores se verán las caras en cuartos, el Partido Paraguay – Japón es el partido incógnita, cualquiera que pase será un rival durísimo, me inclino por el conjunto guaraní, por nada en particular, cuestión de gustos, tal vez por eso de que son dueños de una sangre combativa especial. Veremos.

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